El paddock volverá a ver a Maverick Viñales sobre una MotoGP este fin de semana en Montmeló. El piloto del Tech3 KTM regresa después de fracturarse el hombro izquierdo en Sachsenring, una lesión que ya intentó poner a prueba en Austria, sin éxito. Ahora, tras dos semanas más de recuperación, llega al Gran Premio de casa con ilusión, aunque también con una cautela evidente.
“Después del GP de Austria tuve dos semanas más para recuperarme y eso fue una verdadera ventaja para mí. Aumenté el nivel y la intensidad de mi entrenamiento y cada día me he sentido más fuerte. Es importante para mí estar presente esta semana en el GP de Catalunya, la carrera de casa, porque me ayudará a evaluar todo el trabajo realizado recientemente con mi equipo y a entender dónde estamos. Seguro que no estaré al 100% este fin de semana, pero el objetivo es entender mi estado sobre la moto. Tendré que analizar el fin de semana sesión por sesión, empezando por las sensaciones del viernes por la mañana, y luego seguiré adelante. En cualquier caso, estoy super ilusionado de volver con el equipo”
Maverick Viñales
Su vuelta no llega en un vacío. En su ausencia, Enea Bastianini ha mostrado señales de que la KTM tiene potencial para incomodar a rivales, aunque la cosecha de puntos en Hungría fue decepcionante: dos caídas en la primera vuelta de sprint y carrera principal le dejaron sin recompensa. Aun así, el italiano insiste en que el rendimiento está ahí y que Catalunya puede ser un escenario favorable.
“Tengo mucha confianza para el fin de semana en Barcelona, porque salí de Hungría con más ganas de conseguir mejores resultados después de las dos caídas en la primera vuelta, tanto de la sprint como de la carrera principal. Balaton fue sin embargo muy positivo en términos de rendimiento, mi ritmo fue competitivo y conseguí mi mejor resultado de clasificación de la temporada. Estoy impaciente por llegar a Catalunya y ver lo que puedo hacer en esta pista con la moto. Es una pista interesante, con muchas secciones deslizantes, puntos de frenada desafiantes pero también mucha aceleración. Confío en que podamos seguir aprovechando la experiencia de las últimas citas, que han sido muy positivas para nosotros”
Enea Bastianini
Montmeló será, por tanto, una especie de examen doble para Tech3 KTM: comprobar hasta dónde puede llegar Viñales con un hombro aún convaleciente y confirmar si el potencial mostrado por Bastianini en las últimas rondas puede cristalizar en resultados tangibles. Para Viñales, será un regreso esperado en casa, aunque sin la presión de ganar, sino con la de medir sensaciones. Para Bastianini, la ocasión de demostrar que, con continuidad, puede convertir buenas sensaciones en puntos.
